Los indicadores de desempeño conocidos como KPIs, son métricas clave para interpretar el nivel de productividad de los equipos, trazar nuevos objetivos y evaluar el cumplimiento de las metas. De esta manera se otorga la posibilidad de comparar los resultados con los objetivos y estrategias previamente y dentro de un rango de tiempo establecido.
Vea ejemplos de indicadores de rendimiento y cómo aplicarlos en su empresa.
Esto no solo se usa en una sola área, debido a que existen diversos tipos de indicadores de desempeño, que pueden utilizarse en las distintas áreas de una organización así como: en la comunicación, ventas, operaciones, soporte, entre otras.
Las pymes y grandes empresas se benefician de las estrategias con los indicadores de desempeño, el seguimiento de las métricas de rendimiento se basa en gran medida en el análisis de datos, lo que garantiza una mayor asertividad en la toma de decisiones.
Los indicadores de productividad medirán los éxitos y los fracasos de la empresa, los cuales son esenciales para la evaluación de la estrategia, estos índices suelen variar, pueden modificarse en función de las variaciones del mercado y de las nuevas necesidades de la empresa.
Vea 3 ejemplos de toma de decisiones en empresas de mantenimiento.
Estos indicadores sirven de guía para tener el camino correcto hacia el éxito y es precisamente por eso que deben revisarse periódicamente.
Saber controlar los indicadores de rendimiento es esencial para mejorar la toma de decisiones en la empresa, ya que el análisis se basará en datos concretos.
De este modo, los procesos serán más eficaces y los directores podrán trazar estrategias cada vez más innovadoras y significativas.
La productividad se mide a través de la cantidad de recursos como el personal, tiempo, dinero, entre otros, que se usan en un determinado proceso. Lo que permite descubrir si se está haciendo un uso eficiente de ellos y donde hace falta mejorar o invertir.
¿Qué deberían medir los indicadores de productividad?
Existen algunas métricas que se aplican en una gran variedad de negocios:
Proyectos completados.
Tratos cerrados.
Crecimiento de ventas.
Ingresos por empleado.
Efectividad.
Horas extras.
Tasa de conversión.
Conseguir la eficiencia en un proceso implica obtener los mejores resultados con recursos concretos, los indicadores de eficiencia miden el nivel de ejecución del proceso y están estrechamente relacionado con la productividad.
En este sentido, los altos indicadores de productividad indican una mayor eficiencia, lo que se calcula de la siguiente manera:
Eficiencia: (resultados obtenidos / costo real) x (tiempo real) x resultados deseados / costo deseado) x (tiempo deseado).
La eficiencia establece la relación entre los resultados obtenidos y los deseados. Es decir, mide el desempeño del proceso frente a la meta, el valor de este indicador es porcentual y cuanto más cercano al 100% más eficaz será el proceso. La fórmula es la siguiente:
Eficacia: (resultados obtenido) / (resultados deseados) x 100
Si quieres ampliar el conocimiento, te recomendamos leer el artículo de Daniel Markovitz llamado “La productividad se trata de sus sistemas, no de su gente” publicado en Harvard Business Review.
Para medir la capacidad, debes relacionar el total de procesos cumplidos en un periodo de tiempo preestablecido. Por ejemplo: puedes cuantificar la cantidad de consultas respondidas por tu equipo de atención durante un mes y comparalo con la meta establecida.
Si deseas aumentar su capacidad operativa pero no sabes por dónde empezar, en el artículo de Kantar llamado ¿Tu marca tiene el coraje de crecer? , tiene 10 acciones que puedes realizar para que tu negocio crezca y prospere.
Vea 6 preguntas para hacer en las encuestas de satisfacción.
Los indicadores de calidad son herramientas que miden el nivel de satisfacción en relación con un proceso, producto o servicio. Algunos ejemplos de indicadores de calidad son:
La cobertura: es la que relaciona la disponibilidad de un producto frente a su demanda en el mercado.
La satisfacción del cliente: evalúa si el producto cumple con las expectativas de los clientes, algunos indicadores que puedes usar para medir la satisfacción del cliente son: El NPS, CES, CSAT, la tasa de respuesta, la tasa de abandono de cliente.
La tasa de retención: revela tu capacidad para satisfacer las necesidades del consumidor y superar sus expectativas, lo que puede motivar a comprar de nuevo.
El lucro es la relación entre la ganancia y el valor total de ventas, su fórmula es la siguiente:
Lucro: (lucro) ÷ (valor total) x 100
¿Cómo interpretas este indicador? Por ejemplo, si has vendido $5.000 en un producto y obtenido $500 como ganancia, esto significa que el lucro fue de 10%.
La rentabilidad está relacionada con la inversión realizada con el lucro que se ha obtenido, se calcula al dividir el lucro en un determinado intervalo de tiempo con la inversión realizada inicialmente, e indica cuál remunerable es un proceso.
Es un valor importante a la hora de atraer socios e inversores a tu empresa, el cálculo de la rentabilidad es la siguiente:
Rentabilidad: (inversión inicial) ÷ (lucro obtenido en el periodo) x 100
Estos indicadores de desempeño y medición de la productividad establecen la diferencia entre el valor percibido por el cliente (lo que está dispuesto a pagar) y el valor que efectivamente la empresa gastó en la producción y distribución del producto.
Si necesitas diferenciarte de la competencia, te recomendamos que leas: 5 fuerzas que afectan la ventaja competitiva de una empresa.
La competitividad se mide al comparar una empresa con otras del mismo sector, para conocer el valor de este indicador de medición de la productividad es útil usar la cuota de participación en el mercado.
Lea más sobre que és captación de clientes y aprenda cómo hácer.
Este valor calcula el porcentaje de actuación dentro del sector en el que trabaja una empresa, lo que muestra la relevancia y perspectiva de crecimiento, también permite estimar objetivos y metas reales con base en la realidad de la industria.
Un software de gestión como Auvo, reúne en un mismo sistema soluciones completas para gestionar no solo al personal en campo, sino también los equipos de trabajo, los clientes, la facturación y otros elementos que forman parte del día a día del negocio.
El uso de una única herramienta de gestión permite visualizar los procesos de todas las áreas de un tablero con información completa, desde la planificación hasta la ejecución y medición de los índices.
Con el avance de la tecnología, ha mejorado la comunicación entre el gestor y el personal en campo, ya que aunque no estén en el mismo lugar, beneficia la organización de la rutina de los empleados, supervisa las orden de trabajo en tiempo real y monitorear los km recorridos, todo esto solo con Auvo.
¿Quieres mejorar los indicadores de tu empresa?
Descubre como la gestión integrada puede optimizar la gestión empresarial con un software como Auvo.